Mirar para Atras

Dicen los que saben que la historia es la mejor maestra, que es el espejo donde tenemos que mirar para evitar errores que han conducido a la humanidad a grandes atrocidades. Pues bien la pobre señora historia esta debe de estar tirándose de los pelos viendo que no le hacen ni caso y que una vez más el ser humano, en especial el español y concretamente el catalán caminan hacia el desastre.

Que los nacionalismos y los populismos no son una doctrina a seguir muy recomendable y que han acarreado guerras y destrucción a través de la historia de la humanidad está demostrado cien por cien; y que han llevado a miles de seres humanos a la muerte es un hecho. Y no queremos aprender, una vez más, que un populismo y un nacionalismo mal planteado nos llevan a la ruina.

Seguro que ya habéis visto muchas fotos comparativas de situaciones, actitudes, hechos y comentarios que se están dando estos días en Cataluña por parte de los republicanos separatistas muy semejantes a situaciones, actitudes, hechos y comentarios que se daban en la Alemania nazi, en la Italia fascista o en tiempos de Franco, aquí mismo en España. Grandes algaradas (mucho ruido para los de la Logse) en pos de la causa, represión brutal y acoso a quienes no piensan como ellos (antes era armada, ahora psicológica), adoctrinamiento en las escuelas con el único pensamiento de tener “soldados” dispuestos a todo por la causa sin hacer preguntas, “lideres” con una más que dudosa falta de ética y moral (O que tienen una doble moral vergonzante) o un nulo reconocimiento internacional a sus pretensiones. Faltan las armas, pero es que esto es otro tipo de guerra.

Ya no recordamos (o quizá si y es un acto de revanchismo) que un levantamiento contra las injusticias de, anda que curioso, de otra república, concretamente muy cerca, en España, nos llevó a una guerra cruel y despiadada de hermanos contra hermanos, de amigos contra amigos, a la pobreza, al hambre, a la muerte. Ahora, de momento no hay armas de por medio, pero dadle tiempo a que alguno de los dos bandos de descerebrados opte por esa alternativa.

Tantos modelos de educación en los últimos años, dándole mucho bombo a la tecnología, a los idiomas, a las matemáticas o las ciencias (asignaturas realmente muy válidas e importantes) y defenestrando asignaturas como la historia, el latín o el griego que quizás, no son demasiado “útiles” para el día a día pero que ayudaban al pensamiento crítico, algo fundamental para desarrollar nuestro ser como personas y para tener un cierto criterio sobre las cosas.

Las concesiones que los diferentes gobiernos de este país han hecho a las comunidades autónomas para que establecieran su propio modelo de educación, fijaran sus contenidos y como impartirlos, ha provocado que haya diecisiete más dos historias de la humanidad y de España diferentes según lo que le interese al gobierno local de turno, que en algunas comunidades no puedas ir a escuela si no sabes el idioma local, o que se haya educado a varias generaciones para pensar de una determinada manera y lo que es mucho peor, se haya llegado a educar en el odio hacia sus propios compatriotas y compañeros.

Lo suyo sería salir de esta vorágine de acontecimientos y manifestaciones, pararnos a reflexionar un poco, echar la vista atrás para ver las consecuencias de hechos similares acaecidos tiempo atrás, y reconducir tanto sin sentido.