Animales por encima de todo

Hace unos días nos sobresaltábamos leyendo o escuchando que en Brasil treinta hombres habían violado a una chica de 17 años. Quizá no se dio demasiada importancia a esta noticia porque estaba la final de la Champions por el medio y, la gente de la televisión decidió que era a lo que había que dar importancia este fin de semana, pasando por esta noticia de puntillas.

Lo primero que te produce esa noticia es asco y desazón. Un montón de hombres abusando sin más de una pobre chica drogada y completamente indefensa, te produce cuando menos rabia y la sensación de que las cosas van por el buen camino si se pueden cometer ese tipo de actos. Luego resulta que parece ser era la original venganza de un exnovio para con la chica. Luego resulta que un iluminado lo grabo todo en vídeo y lo colgó en twiter. Luego resulta que aunque mucha gente lo denunció a la policía, también hubo mucha gente que aprovechó la situación para hacer burlas y chascarrillos. Y por último resulta que detienen a la persona que grabó el vídeo y lo dejan en libertad por falta de pruebas.

Abusar así de una persona, más incluso que el daño físico que seguramente ha sufrido la pobre chica, es marcarla psicológica mente para toda la vida; es seguramente uno de los actos contra el ser humano más deleznables que se pueden cometer ya que destruyen su cuerpo, su alma y muchas veces su mente. Y además es de ser un cobarde. Digo yo que, que les puede pasar por la cabeza a esos treinta “hombres” que se prestan a esta acción.

Porque se puede llegar a pensar pensar si ves a una chica o un chico (que vosotras también lo hacéis) que es guapa/o, o tiene buen tipo, qué harías todo tipo de “cosas” con ella, algunas seguramente ilegales, pero lo normal es que te quedes ahí; nunca vas más lejos. Hay que ser un auténtico hijo de perra (con todo mis respeto para estos nobles animales pero no quiero usar otro término) para prestarse a esta aberración, por muchas ganas de sexo que tengas. Y hay que ser además un auténtico inconsciente y de una bajeza supina para grabarlo en vídeo y publicarlo para, supongo, alardear de su “proeza”.

De todas formas es una pena que este tipo de noticias estén a la orden del día por todo el mundo, y que no nos remuevan la conciencia hasta lo mas profundo cuando salen en el telediario o las leemos en el periódico. Somos capaces de llorar porque hemos perdido la final de la champions pero no somos capaces de llorar porque en algún lugar del mundo una persona es humillada y agredida por seres que nunca debieron evolucionar desde su estadio animal. Y lo peor es que incluso a veces se intentan justificar estas animaladas por la costumbre, la tradición o por las prácticas religiosas, o , lo que es mucho más triste, se hacen gracias con ellas.

Esto no es cuestión de feminismo o machismo como alguna gente quiere hacer ver, esto es un ataque al ser humano como ser racional porque ningún ser con un mínimo de razón cometería actos de este tipo contra un semejante.

Nunca deberíamos haber bajado de los árboles……